Este partido, ya de por si importante por la diferencia de puntos que nos llevan los de arriba, se volvió aún un poco más tras las derrotas de Villarreal y Espanyol, pero me parece que nuestros jugadores no quieren, no pueden o simplemente no dan más de sí. Por lo visto ayer frente al Málaga este año vamos a sufrir un poco, no hizo el equipo nada de nada para llevarse el partido, falto de ideas, muy lento y sobre todo muy previsible en todos sus movimientos, las bandas que siempre nos han dado enormes alegrías pasan por uno de sus peores momentos, por lo menos Perotti lo intentaba, encaraba a su par y algunas veces se fue y creó algunas ocasiones, sobre todo en la segunda parte, pero Navas, nos tiene a todos preocupado, desde la vuelta de su lesión no ha vuelto a ser el mismo, no es que no le salgan las jugadas, es que ni siquiera intenta encarar a su defensor, ayer fue completamente superado por Eliseu que lo "seco", y si no esta bien para jugar pues en el banquillo esta Capel, sólo digo que cuando uno no esta bien pues se cambia y punto y no hay que mirar que se llame Navas, si no estas no estas y ayer mereció ser cambiado, porque también es de cárcel hacer sólo dos cambios como estaba el partido, también a Manzano le falto responder con más rapidez tal y como se estaba desarrollando el partido, para mi entender los cambios los hizo muy tarde.
El Málaga vino a hacer su partido y lo hizo bastante bien, todos muy juntitos atrás y ordenados, sólo con esto era suficiente para desmantelar al Sevilla, que tampoco ponía mucho impedimento para ser controlado, los jugadores muy apáticos, dando la sensación de que con un destello de alguno de nuestros jugadores meteriamos un gol y tres puntos a la saca, pues no señores, hoy los equipo están todos muy preparados técnicamente y físicamente y hay que apretar un poco más los machos para llevarse los tres puntos y hace tiempo que no vemos esas ganas en los nuestros. La primera parte fue para ponerla en los colegios a los niños de como no se debe jugar al fútbol, en la segunda mejoramos un poco en los primeros minutos, pero nos diluimos cual azucarillo en agua. Total, un punto y gracias al paradón de Palop en el descuento y dando una imagen penosa, el equipo fue despedido por una gran pitada por parte del público, y no se merecían menos.
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