Gran partido del Sevilla, o mejor dicho gran primera parte, en la que sobre todo en los primeros treinta minutos "meneamos" al Barcelona, pero no se pueden fallar tantas oportunidades y tan claras porque ellos no van a fallar las suyas porque la diferencia de calidad de estos jugadores con los nuestros es inmensa. Aún así que injusto es esto del fútbol porque con la primera parte que estaba haciendo el equipo y con las condiciones que había de agua durante los noventa minutos y un viento horroroso, la entrega de los dos equipos fue magnífica y marcharte al descanso con un 1-2 en el marcador era un mazazo por lo que se vio en el terreno de juego. Antes de marcar nosotros el primer y único gol nuestro en toda la noche, ninguno de los dos equipos mandaba, evidentemente el Barcelona era el señor de la posesión de la pelota, como siempre, ninguna novedad, pero no creaba nada de peligro, y nuestras contras eran peligrosísimas y sobre todo cualquier ocasión a balón parado era un medio gol con la calidad con las que Rakitic las saca. Nos adelantamos en el marcador con una jugada preciosa y un poco de fortuna al desviar Bartra el remate de Alberto Moreno. Y cuando mas "grogui" estaba el Barça el señor linier, no el árbitro, los metió en el partido. El Sevilla quiso seguir intentando ir a por el partido y en una magistral contra, de las que suele hacer el Barcelona con esas tres "balas" que tiene arriba, el "chiquitito", el mejor jugador del mundo, que hasta ese momento no la había ni olido, pegó un "pepinazo" y marcó un golazo. Ahí estaba la diferencia del partido, una que nos cogen y nos la "clavan" y nosotros necesitamos cuatro para hacer un gol. La calidad es la calidad y ésta solo se consigue a base de talonario, ha sido, es y será así, que le vamos a hacer, siempre ha habido rícos y pobres. La cosa es que nos fuimos al descanso perdiendo injustamente, por lo visto hasta ese momento y con un poco de cara de tontos. Comenzó la segunda parte prácticamente igual que la primera, quisimos ir a por el empate y un poco alocados, era lógico, que se desguarnecierá la defensa, pero era lo que tocaba, había que jugársela pero en un enfrentamiento con estos grandes cuando quieres ir a la guerra cuerpo a cuerpo te pueden pasar dos cosas que lo consigas o que te vapuleen. Y no estaba mal la cosa porque seguimos creando ocasiones clarísimas, Vitolo y Gameiro las tuvieron y a cual mas clara, pero otra vez la maldita falta de puntería o de definición nos mató y el "chiquitito" no perdona la que tiene, y así el tercer gol del Barcelona dio por concluido el partido, ya los nuestros lo vieron imposible y bajaron los brazos, todos esperando a que terminará esta pesadilla. El Barça se dedicó a hacer lo que mejor sabe, mover y mover en el centro del campo y los nuestros dando vueltas detrás de ellos. El cuarto, fue un gol de una gran belleza por la calidad de Fábregas al definir delante de Beto, esa es la diferencia, a los nuestros ante el portero rival en situaciones similares les tiemblan las piernas. No pudo ser, se intentó y ya van unos cuantos años, creo recordar que ocho, que no somos capaces de ganarle al Barcelona en partido de liga en el Sánchez Pizjuán, lo de Emery es peor todavía, en toda su carrera como entrenador, nunca le ha ganado al Barcelona. El próximo domingo jugamos otra vez a las 9 de la noche, será frente al Valencia y hay que ganar como sea para terminar con esta maldita racha de tres derrotas consecutivas que nos esta matando.
